En nuestros 20 años de historia, crecimos y nos desarrollamos muchísimo. Desde aquel primer local en Córdoba Capital llegamos a cada ciudad de Argentina, a cada barrio; y nos proyectamos hacia el mundo. Apostamos a la mejora continua y potenciamos el mercado y la industria del helado en toda la región. Siempre fieles a nuestro propósito: Acercar momentos felices a cada persona.
Hoy, decidimos evolucionar nuestra identidad. No solo para reflejar fielmente el desarrollo ya logrado, sino para apostar a nuevos horizontes en el futuro. Para consolidar una marca que, fiel a sus valores, refleje con simpleza nuestra calidad, calidez y cercanía. Una marca que soporte los procesos de innovación y diversificación, en búsqueda de más y mejores experiencias para nuestros clientes.
Vamos a ser más que una heladería, más que una tienda de congelados. Vamos a convertirnos en referentes a la hora de pensar, vivir y sentir esos pequeños grandes momentos de felicidad.